FEINISMOS Y CUIDADOS



¿Por qué un análisis desde el género y los cuidados nos da herramientas para decrecer?

La división patriarcal de la realidad en el binomio “masculino-femenino” y la correspondiente división sexual del trabajo que denuncia el movimiento feminista están en la base del sistema capitalista que el decrecimiento está cuestionando. Mientras en el terreno de lo público, el del trabajo productivo tradicionalmente asociado a los hombres, reina la lógica del mercado y se persigue “a cualquier precio” la acumulación de capital, en el terreno de lo privado y a hombros de las mujeres se están satisfaciendo “gratuitamente” necesidades humanas básicas siguiendo la lógica de los cuidados.
Ni “a cualquier precio” ni “gratuita” es la destrucción de la vida ni la explotación de las mujeres en-cargadas de cuidar.
Desde los feminismos afines al movimiento decrecentista se propone poner el cuidado en el centro de la vida: cuidar los recursos; cuidar los tiempos-ritmos-ciclos; cuidar las criaturas, lxs enfermxs, las personas dependientes; cuidar las relaciones personales, laborales, políticas; cuidarse a unx mismx; recibir cuidados… Esto supone resignificar socialmente el cuidado, sacarlo del espacio privado, reconocer que es imprescindible para la sostenibilidad de la vida, y colectivizarlo. Construir cuidados para destruir explotación, relaciones de dominación, acumulación, opresión,… Una organización social, económica y política en la que en el centro está el cuidado es incompatible con un sistema que busca “a cualquier precio” la acumulación de capital.

ANA, Banda LasLas